Mex Urtizberea paseó por el escenario under del Parakultural, donde conoció a Alfredo Casero con quien hizo los legendarios programas televisivos "De la Cabeza" y "Cha cha cha". Condujo el también legendario programa "Magazine for fai" con su hija Violeta, estuvo al frente de noticieros matutinos como "Mañana vemos", escribió libros de ensayos como "Crónicas masculinas", actuó en "Los exitosos Pells" y en dos filmes de Alejandro Agresti. Hoy, conduce "Laboratorios Dormevu" en las medianoches de Canal 7 mientras prepara las diez emisiones del ciclo "Historia de la risa" para Canal á.
MEX Y EL HUMOR: Lo que yo hago es humor ingenuo, muy absurdo. Me gusta todo lo que está corrido, ¿viste? Pero lo que pasa es que, depende de en qué lugar me veas, yo tamibén hago cosas políticamente incorrectas y críticas. Siempre hago de personaje de antihéroe. Pero también, claro, me gusta el mundo de la inocencia. En For Fai era así. Fue lo más lindo que hice con chicos de cinco o seis años. Después, cuando los chicos pierden la inocencia, pierden todo. El niño es utópico. Para él todo es posible.
MEX Y TINELLI: Nunca lo vi mucho. Recuerdo sí, con cierta simpatía, a los Raporteros. Es que no me gusta la intención de Tinelli de burlarse del otro. Eso no me provoca risa, me duele en el corazón. Si alguien se cae en la calle, no me río. Lo ayudo. Pero claro, a la gente le causa gracia todo aquello donde exista una víctima. El público es bastante morboso. A mí, ese humor no me gusta. Me parece poco inteligente. Además, cuando hacían las cámaras ocultas, era tremendo. Porque el "rompé, Pepe, rompé" era todo real. Era algo bastante endemoniado.
MEX Y EL CINE: Mi top de películas son "La fiesta inolvidable", con Peter Sellers; "Bananas", de Woody Allen; "El cameraman", de Buster Keaton; "Mi tío", de Jacques Tati. Después me gusta el absurdo de Luis Buñuel y el neorrealismo italiano, como "Milagro en Milán", de Vittorio de Sica. A partir de ahí me emtí a hacer humor con lo social y político. Con el humor a partir de las injusticias. Como hago ahora con "Laboratorio Dormevu", donde hay una corporación siniestra de medicamentos que quieren mantener a la población bajo el efecto de sus productos.
MEX Y LOS INICIOS: En el 90, vi a Alfredo Casero haciendo un sketch en el Parakultural donde actuaba de bombista. Tenía un bombo y contaba que iba de gira por Estados Unidos. Y golpeaba el bombo. Yo no lo podía creer. Nunca había visto nada parecido. Después lo vi cantando blues. Alfredo improvisaba en inglés. Yo era músico y me pareció increíble. Tocaba en La Sonora del Plata. Y Omar Viola, el dueño del Parakultural, me propuso actuar. En mi primer sketch, salía vestido de smocking y bombín, con un tanque de nafta. Decía: "las chicas se mueren cuando saco mi tanque". Y al final, hacía un solo de tanque de nafta. Casero se copaba con lo que hacía. Yo había compuesto un tema que a él le encantaba, se llamaba "El hombre bala". Y creo que nos enamoramos. Nos vimos durante dos años todos los días. Él tenía las llaves de casa. Y en casa producíamos "De la cabeza" y el primer "Cha cha cha".
MEX Y CHA CHA CHA: Yo no sabía actuar. No sabía pensar ni escribir un sketch. Y con Alfredo aprendí mucho. Lo más difícil para mí fue que era nuevo. Y nadie me decía nada. No se repetía, no se ensayaba. Era todo improvisado. Era bravo. La única que me dijo algo fue Mariana Briski: "Vos divertite". Así me dediqué a divertirme. Nunca me imaginé trabajando en televisión. Mi papá, que había conducido programas, odiaba la tele. Nos juntábamos los martes en casa y los miércoles a las siete de la mañana se grababa "De la cabeza". ¡Siete de la mañana! Eso era lo peor de trabajar en el programa. Un horario difícil para hacer humor. Además, en el canal todo era muy frío. Pero, bueno, lo que hacíamos era más fuerte que cualquier horario. Yo vivía de dar clases de música, tenía sala en casa y daba talleres. Tendría cincuenta alumnos. En el 93, largué todo y me dediqué a la tele.
MEX, CAPUSOTTO Y CASERO: La televisión es difícil. Decepciona. Capusotto tiene más conducta, es más disciplinado, y lo tiene a Pedro Saborido que es un genio, escribiendo los guiones. Tiene una claridad increíble de qué cosas hacer, cómo armar los sketches. Y Capu es muy serio y responsable. Además, es tranquilo y creativo. Con Capu podés contar. Con Casero no sabés qué es lo que va a querer hacer mañana. Yo lo llevé a un programa para chicos en Canal 7. Estaba todo listo, pero al final a él no le cerró. El problema con Casero es que se boicotea a sí mismo. Y eso me da una pena terrible.
MEX Y EL TALENTO: El que mucho abarca, poco aprieta. En el fondo soy bueno para generar cosas. Ahora me dediqué a la actuación, pero toco muchos instrumentos. No soy una maravilla en ninguno. No soy virtuoso, pero los toco. Me jacto de ser autodidacta. Apenas con diploma de bachiller. Me espantan los libros de métodos. Los libros que te enseñan a hacer las cosas como todo el mundo. Yo siempre aprendí a rodearme de gente talentosa. Nunca quise entrar en el sistema, me parecía que me iba a sacar mi creatividad.
MEX Y LA LEY DE MEDIOS: Todo el mundo tiene que estar de acuerdo en que no haya monopolios. Fijate que todo lo que yo hice fue una lucha en contra de los monopolios. For fai, por ejemplo. O Dormevu ahora. Todo el mundo tiene que estar de acuredo con que alguien regule los medios. Porque todas las operaciones políticas parten de los mismos medios. Y a la gente en la calle estas cosas le chupan un huevo. Es muy difícil gobernar cuando el Grupo Clarín maneja el 70% de la opinión pública. No me jodan, estas últimas elecciones las ganó Clarín. Si De Nárvaez no existe. Son gente que fue criada pra hacer negocios y no merece el más mínimo respeto. Esta gente es cada vez más siniestra. Con la ley de medios, salió a la luz toda la mediocridad. Hay muchos periodistas que se vieron encerrados y tenían que salir a defender un negocio que no es de ellos.
MEX Y LOS KIRCHNER: Yo los apoyé a los K en muchas cosas. No me gusta que hayan hecho una fortuna en el Calafate. Pero me gustan los Kirchner. Hay que tener huevos para hacer todo lo que hicieron en materia de Derechos Humanos. Es muy complejo gobernar un país como Argentina, donde cada vez hay más kioscos.
MEX Y EL PRO: Los candidatos tienen que reírse de ellos mismos. Sino, quedan afuera. Pero, vamos a decir algo, muchos no tienen sentido del humor. Vos los ves a Macri o a De Narváez haciéndose los graciosos y decís: qué triste. Se quieren mostrar como gente normal y no lo son. Casi no tienen vida. Dedicaron toda su existencia a hacer guita. Una vez le pregunté a Macri si iba a los bares, si se reunía con amigos. Y nunca, nada. Su único recuerdo de felicidad fue cuando vivía en Tandil y salía con su primera novia, antes de hacerse cargo de los negocios del papá.
MEX Y EL FUTURO: Tuve épocas donde necesité pedir plata porque no había ahorrado. Llegado el momento, no invierto. Me la gasto toda. Quiero vivir bien. Si estás proyectando todo el tiempo, le sacás la gracia a la vida. Y si en 2012 todo se pudre, como dicen los mayas, ojalá que me encuentre de joda.
